por: Max «Drlacxos» Cueto
La escena musical local tiene de todo, dentro de la misma habrá pequeñas sub-escenas que la componen aumentando las opciones y la diversificación a la hora de valorar lo que nos gusta. A nosotros como medio se nos hace difícil basarnos en solo algunos géneros y hacernos los ciegos para otros, no lo podemos negar, en sonidos, la República Dominicana lo tiene todo.
Santiago de los Caballeros este año ha demostrado estar lleno de nuevas propuestas, sin importar el género. A mis manos hace unas semanas llegó el primer trabajo de la banda de rock/hard blues, Redux, un proyecto que inició con la idea de ser una «coverband» del montón, de esas que siempre nos quejamos por ser talentosas y quedarse haciendo como Kinito: «merenguitos pa’ comer». Pero con el tiempo cambiaron de idea empezando a crear canciones propias, dentro de un género que aunque en otros lugares de la isla (Santo Domingo principalmente) considere muerto, pues sepan que en la parte Norte sigue vivo.
Redux está compuesta por integrantes de otras bandas de Santiago, así es como Adolfo Herrera, Carlos «El Pocho» Alba, Luis «Luichon» Estrella, Guillermo Perdomo, y Ayrton Fernandez (quien escuchamos hace unas semanas con el lanzamiento de Rag Doll de la banda de metal Nominal) forman esta banda y lanzan su primera producción que lleva por título Polvo.
Esta posee esa calidad sonora para un disco de su clase, rock pesado con influencias de blues, y esa inclinación al «Pub Rock» donde las guitarras dominan en la presencia de la mayoría de las canciones. Desde la primera escucha sabemos que tenemos un producto trabajado, la veteranía que otorga la experiencia de tocar en diferentes lugares del circuito rock pesado. En ocasiones me recuerdan a la banda local de metal e industrial Nux, la fuerza de la voz de Ayrton puede causar ese aire sumado a la sexualidad de las letras en algunas canciones que componen la producción.
Redux hace de Polvo una carta de presentación válida, cada integrante de la banda es notable en el sonido, puedes deducir de dónde vienen, musicalmente hablando, por momentos esos espacios instrumentales hacen que la batería, el bajo y las guitarras tengan su propio protagonismo. En 6 canciones en un total de casi 26 minutos, la banda toca de una manera magistral. Un álbum sin momentos bajos, en donde los fanáticos de este tipo de producciones pueden tener una nueva banda a la cual deben de seguir, canciones como «Hasta el fin», «El Viaje», «Salvaje» o «Devorarte» hacen que este álbum sea una de las sorpresas dentro del rock hoy en día en la República Dominicana.