por: Max «Drlacxos» Cueto
José Miguel Taveras es una de las jóvenes revelaciones que poseemos en la escena, no necesita mucho para sorprender: una guitarra acústica y dejar que su voz salga de su boca. La sencillez que exhibe tiene una belleza olvidada en los últimos tiempos, y eso es lo que hace en «Until The Break Of Dawn», una producción disfrutable, un álbum que fácilmente nos lleva a recordar ese «American Folk» emergente desde los 60’s con toques más frescos y modernos, conectando con los nuevos tiempos.
El estilo de Taveras es tantas cosas a la vez, pero sin matar ni por un instante lo bonito de lo simple, por eso me vienen a la cabeza comparaciones con artistas como José Gonzalez, M. Ward, Harry Nilsson, o el proyecto The King Of Convenience del noruego Erlend Øye; existe una exploración en los sonidos, en donde nos encontramos con detalles destacados de un género en especifico creando otras cosas, haciendo que el resultado final sea encasillable.
Un viaje a explorar el universo sonoro de José Miguel Taveras es el que hacemos en estas 6 canciones, canciones en el idioma inglés que nos hace dudar de la procedencia de lo que escuchamos, melodías que nos calman, que pudiera ser el soundtrack perfecto para darse una escapada de la ciudad. Iniciando con «Until The Break Of Dawn» los primeros segundos de este intro me hacen recordar al cantautor americano Harry Nilson trayéndonos una nostalgia tan solo al inicio y desarrollo de este trabajo musical.
«In Her Eyes» es otra muestra de la facilidad de crear canciones con una formula pop, canciones que fácilmente se quedarán con nosotros, que no dudamos que podamos escucharla alguna vez en la radio, para luego pasar al primer single y sin dudas el primer enganche con esta propuesta, «Heavenly Instant» considerablemente es la mejor manera de explicar lo que hace José Miguel con su música, esas decoraciones sonoras (sonidos ambientes de algún campo nocturno) que acompaña esta composición que junto trabajo visual a cargo de Pedro Mestres crean todo un combo perfecto; seguido por «Piece of my heart» que mantiene esos aires de bossa nova que sentimos en su antecesora.
Llega «Heal The Drought» como si nos cambiara el rumbo, escuchamos el sonido de un piano, indicandonos la versatilidad del cantautor, para luego sumarle unos silbidos que nos dan ese sentimiento de soledad, creando un momento especial en esta producción; y para cerrar, tenemos «Mariposa» la única canción en castellano en lo que conocemos, y lo hace muy bien, agregando esa nostalgia en una canción que nos habla del fin, manteniendo ese mismo «feeling» que ha venido mostrando a lo largo de estos 17 minutos.
Until The Break Of Dawn es un paso muy bien jugado, es el inicio de una carrera que sabemos que estará llena de sorpresa, y en la misma el cantautor aprovecha cada canción para mostrar todo lo que puede hacer, dejando una brecha para sorprender aún más en la próxima.