Día Internacional del Jazz, a lo Discolai.

por: Manuel Betances. Imagen: Jeremy Sutton


Hoy viernes 30 de abril de 2021 celebramos el “Día Internacional del Jazz” (International Jazz Day). Una efeméride que no pasa por alto desde el año 2011, o sea que esta celebración cumple su primera década. Durante la jornada de este año se realizarán miles de actuaciones con entradas gratuítas en casi los 200 paises participantes, pero también de manera virtual hay un extenso programa de actividades (por ejemplo, acá pueden consultar las que se realizarán en República Dominicana). Además de las actividades regionales, se celebrará un concierto mundial presentado por el actor Michael Douglas, con transmisión desde las sedes de la Unesco, y Naciones Unidas, en Nueva York. El secretario general de la ONU, António Guterres, intervendrá durante el espectáculo, del que el pianista Herbie Hancock será el director artístico, mientras John Beasley tendrá a su cargo la dirección musical.

Ahora, a nivel local hemos querido participar en el Día del Jazz con este artículo donde consultando a 4 amigos y colegas, unos vinculados a la música, otros a la gestión cultural, y por demás amantes de este género musical que tanto arraigo tiene en el mundo, nos dan su visión sobre esta música, y sus discos favoritos. De paso, hemos creado un playlist con esa selección para que celebres con nosotros, con lo mejor y selecto del jazz hecho en nuestro país y otras latitudes. ¡A Disfrutar!

Marivell Contreras – Periodista y escritora.
  • Con el alma de Tavito – Juan Colón y Manuel Tejada.

Una profunda admiración por Tavito Vásquez y su virtuosismo, unida a la calidad musical y talento de estos colosos, amantes y cómplices de un jazz comprometido con nuestro merengue, hacen de este disco, uno de mis favoritos de las últimas dos décadas. Con la música en el cuerpo, el alma, definitivamente, baila.

  • Jazzeando – Sandy Gabriel.

Soy admiradora del sonido del saxo de Tavito, Félix de Rosario, Crispín Fernández y en consecuencia de Sandy Gabriel. Este disco tan jazzístico y tan dominicano me encantó desde el principio, porque tiene una interesante mezcla del pasado con su melancólicos y sensuales sonidos del Caribe y El Jazz como Dios manda. Una mezcla que mueve el cuerpo y el alma.

  • What a Wonderful World – Louis Armstrong.

Porque me gusta el jazz en todo su esplendor clásico y americano, porque amo los sonidos del Missisippi y amo ese GORDO maraviloso que fue Louis Armstrong, amo este disco como algo sagrado que me ecualiza y me lleva a otras instancias de las que también me siento parte. El mundo es maravilloso porque tiene estos sonidos que conmueven el alma.

  • Michel Camilo.

Se me hace difícil tener que elegir uno solo de Michel Camilo, pero de eso se trata, por encima de ‘Spain’ o ‘Why Not?’, este maravilloso disco por el que conocí su grandeza en el que está esa pieza inolvidable llamada ‘Caribe’ y ‘Suite Sandrine’, el maestro vierte toda su alma. Caribe me enseñó que además de mi dominicanidad, pertenecemos a un sonido mayor inspirado en el Mar Caribe. Oírlo es comprobar que el talento con disciplina le han producido una técnica y unos sonidos tan exclusivos, que el que lo toca parece un mago.

  • El Inigualable – Bola de Nieve.

El piano y la voz de Bola de Nieve son más que música a mis oídos. Escucharlo hace que un volcán de emociones se desate en mí trasladándome a un espacio en el que el tiempo no existe. Sus dedos golpean el piano y la música sale a borbotones para jugar con esa voz única que canta mientras llora y así nos lleva de la mano a un rincón del mundo donde un niño, triste, vende maní, mientras sueña con tocar en un bar de Nueva York, entonces cierra los ojos y todos sucumben con su voz y amante piano.



Alexis Méndez – Productor de radio y gestor cultural.
  • Jazz Invierno Santo Domingo – Darío Estrella Y Su Vanguard Jazz Group.

Recoge un concierto memorable en Bellas Artes, producido por Federico Astwood, donde Darío Estrella agrupa un «Todos Estrellas» con la participación de Ángel Miró Andújar «Catarey», Mario Rivera (que llegó de Nueva York), Félix Del Rosario, entre otros. Esa presentación significa el comienzo de la historia contemporánea del jazz en República Dominicana. De ahí la importancia de ese registro.

  • Licuado Vol.2 – Crispín Fernández.

Crispín y Kilvio Fernández con su grupo Licuado supieron dar un merengue jazz sin quitarle la esencia del merengue y su objetivo principal: el baile. Aunque ya habían grabado una producción antes, es con esta donde alcanza el mayor nivel.

  • El Comandante – Mario Rivera.

Desde Nueva York, logra el equilibrio perfecto entre el jazz y el merengue, con un álbum donde conviven la atmósfera del jazz, soportada por el patrón rítmico del merengue. Agrupa figuras dominicanas, como Alex Díaz (su discípulo); maestros del jazz como George Coleman; y otros maestros del jazz latino como Hilton Ruiz e Ignacio Berroa, entre otros.

  • Sending Things in Order – Josean Jacobo & Tumbao.

Esta propuesta nos trae jazz afrocubano, merengue jazz y, lo más importante, los primeros vestigios de la línea que hoy lo define y lo ha proyectado en el ámbito nacional e internacional: la fusión del jazz con músicas tradicionales dominicanas.

  • Jazzeando el Cancionero Dominicano Vol. 1, 2 y 3 – Retro Jazz.

Estos inician la saga de canciones dominicanas. Es una presentación a las nuevas generaciones, pero además sus producciones involucran varios estilos y géneros fusionados por el jazz, bajo la sombrilla del pop, lo que lo acerca al gran público.


Sabrina Estepan – Cantante.
  • Cabaret Azul – Patricia Preyra & Juan Francisco Ordóñez.

Son 11 temas, que para ser un álbum solo a guitarra y voz es un disco que explora nuestro caribe, que suena caribeño desde que lo pones. Patricia es una cátedra de emociones y matices durante todo el proceso. Ordóñez es magsitral. Hay de todo, desde una tonada del Terror Díaz, hasta las canciones que Patricia le dedica a su hijo o a un gato, y eso lo hace un disco totalmente maravilloso.

  • Gala – Patricia Pereyra.

Es una evolución en Patricia. De mis discos favoritos de la vida entera, y confieso que la discografía ella me ha influenciado. «Gala’ tiene sonidos más electrónicos, aquí explora más el rock, se le nota más segura.

  • Kumbajei – Xiomara Fortuna.

Con Kike del Rosario dirigiendo este trabajo, es algo brillante, con una serie de músicos como Rafa Payán, Rafelito Mirabal, el mismo Kike, Carlitos Estrada y la propia Xiomara en unas fusiones interesantes con temas muys nuestros. Aquí tenemos reggae, pri-prí, mangulina, salve, es una producción muy completa con nuestro folclore como base combinado con lo mejor de la música del mundo.

  • Licuado Vol. 1 – Crispín Fernández.

Maestría. Los arreglos son impresionantes. La portada. Para mi es una de las mejores portadas que se han hecho en el país, es súper conceptual y va al grano, es muy clara: un exprimidor exprimiendo al mundo. Ellos son eso, un licuado de la música del mundo y te lo dejan muy claro en la entrada y así mismo suena todo, con una maestría en la dirección con Crispín junto a su hermano Kilvio, son impresionantes.

  • On fire – Michel Camilo.

Con este álbum Michel subió a la estratósfera, en ese formato trío junto a la batería y el bajo, son como dinamita. Todo lo que tiene este disco es maravilloso, pero la precisión del free-jazz por parte del baterista y si eso lo sumas al tumbao latino que le pone Michel, entonces tienes un disco completo que es una delicia.


Luis Reynaldo Pérez – Poeta y gestor cultural.
  • Un día como hoy – Hedrich Báez & La Juntiña.

Un día como hoy es un disco esencial para entender la dominicanidad desde la música, aunque esté alejado de lo que tradicionalmente se ofrece con la etiqueta de «fusión afro». Estructurado sobre sonoridades poco exploradas de nuestra tradición: desde el folclor vocal, el gagá, pri-prí, y otros ritmos.

  • Metura – Joshy & su Cu4tro.

En este disco se ofrece una fusión que, hasta donde sé, ha sido poco frecuente en la música dominicana: son y jazz. Pero no se queda ahí. Se expende el registro de ritmos tradicionales, desde bachata y gagá, hasta pasajes vocales cercanos a la salve o al canto de hacha con el cuatro y el tres como instrumentos centrales sobre el que se monta todo este armazón sonoro.

  • Volando bajito – Patricio Bonilla.

Patricio Bonilla, reconocido músico dominicano, debuta con este disco en el que fusiona salsa, merengue, bachata con jazz y ritmos afrocubanos. Desde ese merengue sicodélico, que da título al disco, arrancamos volando bajito en un viaje lleno de sonoridad rítmica, en un brebaje lleno de sabrosura caribeña capitaneado por el trombón, instrumento tocado por Bonilla, quien además compuso todos los temas.

  • Conpambiche – Junior Santos.

Junior Santos, percusionista dominicano residente en Canadá desde finales de los años ochenta, lanza su disco Conpambinche, en que fusiona jazz y pambiche con influencias de lo afrocubano. Mi tema favorito es «Guanánico», pieza guiada por la melodía de un saxofón, cargada de un dejo nostálgico.

  • Error subcutáneo – Error Subcutáneo.

Este disco es una de las sorpresas del 2020. Una mezcla de música electrónica con ruidos, ambiente de la calle y gagá, palos, boleros, son, jazz, de la mano de Mauro Ferreiro y Gonzalo Frometa, que traen una especie de aire nuevo a la fusión realizada a partir de la tradición afrodominicana.


Puedes escuchar estas recomendaciones y otras más en nuestro playlist «Jazz se Armó», y disfrutar de sus nuevas actualizaciones que va por el jazz de todas partes y todos los estilos.