10 momentos que hicieron de Jhonny Pacheco el Padre de la Salsa.

Por: Manuel Betances.-

Que tu nombre sea sinónimo de ritmo, sabor, y sobre todo de herencia y orgullo de tus raices, es una gran satisfacción. Y creemos que así vivió toda su vida ese señor bautizado como Juan Pablo Pacheco Kiniping, creador de un movimiento que tocó a millones de seres humanos, y los puso a bailar. Por eso hoy, día de duelo nacional en República Dominicana por su muerte como forma de honrar su legado, te traemos 10 momentitos breves de la vida del Zorro Plateado: Johnny Pacheco.


1. Santiaguero porque sí.

Nació el 25 de marzo de 1935 en Santiago de los Caballeros, exactamente en el sector de Los Pepines (al igual que Víctor Víctor). Se crió escuchando a la Orquesta Aragón y radionovelas cubanas. Pero gracias a vivir en un entorno musical con su padre Rafael Azarías Pacheco, desarrolló ese gusto por la música caribeña. Por vainas de la vida, en 1942 su padre, quien fuera miembro de la orquesta Liras del Yaque, decidió abandonar el país para irse a vivir a Nueva York con su familia. 30 años después, el más pequeño de esa familia se convertiría en el músico latino más importante del movimiento musical conocido como la Salsa, siendo co-propietario del sello FANIA Records, donde agrupó a los maestros músicos del género antillano para dirigir y producir durante más de una década el catálogo de música tropical más escuchado y más vendido en toda la historia del disco.

2. A meter mano en la música.

En 1960 forma su primera orquesta llamada Pacheco y su Charanga, la primera banda latina en presentarse en Teatro Apollo en 1962. Para 1963 crea la disquera Fania Records junto a Jerry Masucci, y para el año siguiente el sello lanza su primer disco: «Cañonazo». Este contaba con Pete «El Conde» Rodríguez como vocalista. Rodando y maroteando entre El Barrio y varias ciudades de Estados Unidos, en 1968 crea la orquesta Fania All Stars que contó en sus filas con artistas como Larry Harlow, Celia Cruz, Willie Colón, Héctor Lavoe, Ray Barretto, entre otros.

3. Pero, Fania, ¿qué significa?

La discográfica tomó su nombre de una antigua canción cubana cantada por Reinaldo Bolaño. Fania es un nombre de mujer polisémico, polivalente y no está sujeto a ningún Estado, país, lengua o territorio. Es culturalmente extraterritorial. Algunas fuentes indican que el nombre originario Fania, posible versión abreviada de Estefania, proviene del griego y significa “coronada por la victoria” (stéphanos / Στέφανος es corona). De ahí pasó primero al protoeslavo, a todas las lenguas eslavas, y al italiano, entre otras. En griego moderno phanéia, escrito φάνεια significa transparencia. El punto es que este conglomerado de músicos, artistas, técnicos y demás, eran conocidos desde Australia hasta el Japón, claro, aún se recuerda cuando ofrecieron ese concierto en Africa en 1974. Esas mismas estrellas de la Fania abarrotaron el Estado Olímpico de Santo Domingo posteriormente.

4. Hizo de todo. O sea, DE TODO, y con todos.

Grabó y compuso más de 150 canciones. Desde la pachanga, son, guaguancó, hasta la salsa y el merengue, Pacheco le metió a todo. Y por supuesto, contó con grandes artistas, empezando literalmente con Pete El Conde Rodríguez, siguiendo con el eterno Melón, Melcochita, Daniel Santos, Monguito, y una artista a la que revivió para nuevas generaciones posteriores en los 70: Celia Cruz. Aparte de que con Celia nos puso a bailar merengue con sabor en varias ocasiones. Es que la combinación Pacheco-Celia era de lo que no había.
Como dato extra: Johnny estuvo bajo la producción de la canción “Bailando Salsa” del grupo español Mecano (alcanzando medio millón de copias vendidas al mes de su lanzamiento). 

5. Filantropía.

No todo se quedó en el rubro de la música, sino que Johnny dió de lo que recibió y por ello se involucró en el mejoramiento de la comunidad latina. Por ejemplo, participó en el concierto benéfico contra el sida llamado «Concierto Por La Vida», en noviembre de 1988 en el Avery Fisher Hall de New York. Mostró solidaridad con las víctimas del huracán Georges colaborando con Hispanic Federation Relief Fund durante el «Hurricane Georges Relief Fund 1998». De igual forma participó en un evento similar en el Hostos Community College. Como colofón, en 1994 el músico creó el Johnny Pacheco Scholarship Fund (Fondo de Becas Johnny Pacheco), con la que cada año ayuda financieramente a un estudiante latino en su primer año de universidad.

6. Cine & Teatro.

Paralelo a su exitosa carrera musical, Pacheco produjo varias películas que ayudaron a terminar de cimentar la popularidad internacional de la música latina, entre ellas, “Los Reyes del Mambo” (1992), protagonizada por el actor español Antonio Banderas. Además, en 1999, llevó su conocimiento musical al teatro, y colaboró en la creación del musical “Quién Mató A Héctor Lavoe”, que cosechó gran éxito en Nueva York.
Como nobleza obliga, en abril del 2014 se realizó el documental Yo soy la salsa, que recoje sus más de 40 años de trayectoria musical, y la excusa perfecta para los 50 años de la fundación de la Fania, junto a sus amigos en un concierto realizado en Santo Domingo. Todo esto queda registrado en dicho docu-film.

7. Reconocimientos.

Justo cuando perdemos a una figura de esta magnitud, es que la amnesia colectiva de sus propios compatriotas dice presente. Por eso es bueno recordar que contrario a lo que muchos aseguran de que «a Pacheco no se le reconoció lo suficiente en RD», es bueno recordar que por ejemplo, el presidente Joaquín Balaguer le otorgó la Medalla Presidencial en 1996; para 2004 en su natal Santiago de los Caballeros, el ayuntamiento de esa ciudad lo declaró Hijo Distinguido del Primer Santiago del Mundo, y en ese mismo año la Universidad Tecnológica de Santiago (UTESA) le concede un Magister Populi, además de ser homenajeado en uno de los congresos de música caribeña organizado por el Centro León. Y como si fuera poco, en su barrio natal hay un mural en su honor; de ñapa, en 2009 el Senado de la República lo declaró Gloria de la música nacional y afro-antillana y se le otorga el Gran Soberano de los Premios Casandra.
Si eso no es valorar y reconocer a un artista en su propio país, entonces queremos saber qué sí lo es.


8. Fue el creador del himno de los impuntuales.

«El Rey de la Puntualidad», tema popularizado por Héctor Lavoe, se convirtió en algo recurrente durante cada concierto. Resulta que según Héctor, los demás llegaban muy temprano siempre, aunque la orquesta tuviera que esperar horas por su entrada a escena. Curiosamente, Pacheco argumentaba durante una entrevista en los 80, que a pesar de lo impuntual que era Lavoe en materia de conciertos, si él lo convocaba para grabar en estudio a tal hora, Héctor estaba PUNTUAL. Claro, al jefe no se le coge de relajo. Aún así, Johnny quiso honrar las hazañas horarias del Cantante, y quedó como testimonio ese tema en cuestión.

9. Con los grandes, y humilde siempre.

Durante varias décadas, Johnny Pacheco fue uno de los artistas más solicitados en la industria musical y tocó junto a músicos latinos de la talla de Dámaso Pérez Prado, Xavier Cougat, Tito Rodríguez, Tito Puente y Celia Cruz, entre otros. Además, el salsero actuó como artista invitado con muchas leyendas del jazz y la música popular de Estados Unidos como Quincy Jones, Stan Kenton, Tony Bennet, George Benson, Sammy Davis Jr., Ethel Smith y Steve Wonder.


10. Siempre mencionó y habló de sus orígenes.

A pesar de que su padre decidiera salir del país por un tema político, y aún sin ese percance durante la era de Trujillo sin tener necesidad de ello tampoco, Pacheco nunca dejó de hablar de su barrio Los Pepines en Santiago. Eso es suficiente para tener claras sus raíces.

Hasta siempre, Zorro Plateado.


** Te dejamos con un playlist con mucho sabor, para que celebremos el legado del Padre de la Salsa:

Playlist por: @QuieneCuca