por: Rossy Díaz/ Ceci Moltoni
Xiomara Fortuna y Vic Contreras en entrevista y conversatorio con el público en Generación Fusión.
Parte 1. Vic Contreras
Rossy Díaz: Cómo músico que tú eres, cómo has logrado tener un sonido que suene a ti? Cómo has logrado conjugar el sonido Victor en todos los proyectos que has estado.
Vic Contreras: Inicialmente no me propuse eso, decir “yo voy a hacer esto así porque es mi sonido”. A mí me gustan los buffet, porque puedes coger un chin de cada cosa, y en la música me pasa igual. Me aburro muy rápido de lo mismo y tengo la necesidad de estar oyendo música nueva. Supongo que de toda esa variedad hay un sello personal, todo el mundo es único y todo el mundo tiene un sonido propio.
R: Te vamos a preguntar por algunos proyectos en los que tú has tocado y servido de la producción musical y tú nos dices qué pensaba Victor sonoramente en cada proyecto.
La Kereya.
V: La Kereya fue una banda de rock. Fue la primera vez que empecé a tomar la música en serio, se puede decir. En el sentido de una banda componiendo periódicamente, sistemáticamente, ensayando siempre, hicimos un disco. Mi deseo por empezar a experimentar con la música dominicana comenzaron ahí. No había tanta investigación pero estaban los deseos y estaba lo empírico que uno tiene por ser dominicano. Uno tiene un soundtrack aquí, la música suena en la calle, en la guagua, en el colmado, en el supermercado.
Ese disco La Kereya lo produjo un músico dominicano por el cual siento admiración y fue un honor para mí trabajar con él, Ariel Sánchez. Ese proceso de hacer un disco que puede ser tan tedioso si no hay alguien que te puede acompañar y encaminarte más. Eso se lo agradezco mucho a él, me hizo poner la música en otro plano. Saber que hay que trabajar y esforzarse para que la música camine, me hizo grandecito por decirlo de alguna manera, me ubicó. Fue una experiencia chévere, fue mi momento de aprender a tocar un poco más la guitarra porque era un power trío. Cada banda que he estado ha sido como una escuela, una materia en esta carrera.
- R. Recientemente te escuchamos en concierto y abriste con Liborio que lo tocaban con La Kereya y estaba en el disco, era importante recordarlo. Acompañaste también a Manny Áudico y ahí también se sentía que estaba Vic Contreras por eso menciono la importancia de ese sonido independientemente del proyecto en que estés.
Qué significó para ti un disco tan versátil como el que grabó Manny Áudico?
- V. Yo llegué a la mitad de ese disco. Ya había varios temas y participamos en los que fueron los singles promocionales del disco como Duarte Subiendo. Para mí fue una escuela también, él es para mí un gran cantante y compositor, me parece un tipo con un sonido muy propio. En mi música hoy se puede reflejar esos aprendizajes, fue para mí un encuentro con otro tipo de música para fusionar, como la música cubana o el son dominicano. En ese tiempo conocí al maestro Victor Nolasco que toca el cuatro en el Grupo Maniel, conocer ese instrumento fue otra abertura para el aproach de tocar, me gustó conocer los trucos, inversiones que hacen y descubrir cómo imitarlo en la guitarra. En esa banda fue que empecé a tocar y acercarme al cuatro. Pero también es un disco variado tiene temas bien rockeros, africano de zouka, de kompa, hubo investigación ahí. Aprendí mucho de los músicos que estuvieron ahí y eso enriqueció mi lenguaje.
- Victor es también estudiante de música en la UASD y a la vez es actor de teatro y esa formación influye en lo que hoy en día es su proyecto con La Alucinante y todo su proceso. Hablanos de por qué decides estudiar música a nivel superior y cueántanos la importancia que tiene el teatro para ti?
- Decidí estudiar múscia de manera académica por querer aprender más, porque entendí que es un oficio y hay que estudiar. Creo que estudiando es una manera de superarse, por lo menos yo quiero todos los días ser un mejor músico y aprender más y por eso estudio y escucho mucha música y veo muchos músicos.
Hablando del teatro, hace talvez 10 años formo parte de un grupo de teatro, el teatro Guloya, un grupo muy importante para la escena independiente, por su trayectoria y me siento muy honrado de pertenecer. Cuando entré al grupo tocaba música en una onda rockero, oyendo Tool, Protest The Hero, música extrema. Cuando empecé a trabajar con el grupo me llamó la atención que sus montajes están basados en la cultura dominicana y por ende en la música dominicana y en los montajes había mucha música folklórica dominicana que nunca había escuchado, con 16 años no sabía lo que era el gagá o la sarandunga, nadie me lo había enseñado, no se ve en la escuela ni la televisión. Eso llamó mi atención.
Ahora está la internet, pero antes lo que hacían los grupos es tener una biblioteca de música que pudiera servir para obras. En la biblioteca de Guloya, me acuerdo un día estaba yo solo en el teatro sin nada para hacer y vi un disco amarillo que llamó mi atención. Lo saqué. Decía Kumbajey. Lo vi, lo puse. El primer track me acuerdo como ahora, “kumbajaiba, kumbajey, kumbajey, puff y empezó el cd con to lo que da y para mí eso fue sorprendente y alucinante. Yo venía de escuchar rock y para mí el rock más que un sonido o una batería y guitarra eléctrica es como una actitud, que tiene impregnada en la música y ahí descubrí ue la música dominicana folklórica lo tiene perfectamente. Esa fue la primera vez que pensé que podía haber algo más para llevarme a un lugar que yo estaba buscando.
El grupo Guloya tiene como norma hacer investigaciones de campo y yo me pegaba en esos coros, ahí aprendí mucho sobre la cultura dominicana y la música. Fue mi primer acercamiento, a investigar qué es, cómo y saber quiénes somos nosotros porque al final del día es lo que somos nosotros y le damos la espalda.
Parte 2. Xiomara Fortuna
Rossy Díaz: Hablando de teatro y música, Xiomara también es una mujer cercana al teatro. Hay una disciplina del teatro en tu vida y en tu perfomance en vivo. Háblanos de esa experiencia.
Xiomara Fortuna: Realmente yo me inicié en el arte en el teatro, allá en el pueblo mío (Montecristi). En los años 70’ los jóvenes estábamos muy metidos en el movimiento revolucionario, creíamos en el cambio y estábamos en contra de la Dictadura de Balaguer y en los pueblos se hacían grupos de teatro como una manera de protestar. Ahí me inicio en esos primeros 70’, muy chiquitita realmente. Cuando vine a Santo Domingo conocí unas muchachas con deseos de hacer teatro dentro del movimiento feminista. Entonces decidimos hacer un grupo con carácter feminisita. Fui alumna de Villalona, de Ana Delta Soto. También les hice un montaje al grupo de Las Esclavas del Fogón en La Romana, sobre la vida de Tingó. Desde ahí el teatro me ha marcado, yo hago mucha perfomance en la música y eso se debe al teatro, destaco mucho algunas palabras para romper con lo que viene y sacar a las personas de lo que viene escuchando y eso viene del teatro. Es una fuente inagotable, siempre me va a acompañar aunque no creo que vuelva yo a hacer teatro.
R: Xiomara tiene una particularidad y es que además de todos los discos, está la importancia del vivo. La gente se acuerdo mucho del show, cada lugar y fecha, y eso tiene que ver con tu manera de escenificar muchas canciones. Podemos sentir lo que las canciones transmiten.
X: Como yo concibo la idea del show tiene que ver, busco una coherencia, una idea del comienzo hasta el final. Lo comparto con el equipo cuando lo he madurado mucho y lo he sentido y creo que en general se puede ver. La intención mía siempre es que la gente sienta lo que yo siento, lo que sentí al momento de hacer una canción. Por qué la escribí, ese contenido a mí me tocó mucho y quiero que el otro sienta eso mismo. Trato con la interpretación de comunicar esa emoción, ese sentimiento.
R: En el Teatro Nacional hiciste un concierto increíble descalza. Sin embargo en Bellas Artes cuando Paseando salió del aire una zapatera donde se ponen todos los zapatos y eligió sus tennis y se los puso. Dos momentos tan importante y el tema de los zapatos presente.
X: Tú sabes que los zapatos definen cómo va a estar una persona, cómo se siente, cómo va a caminar. A mí me educaron con la idea de que cuando una va a salir tiene que estrenar y si es un vestido el zapato tiene que combinar. Pero resulta que como yo crecí siendo una autora independiente, sin todos los patrocinios y apoyos; este tema de los zapatos llegó porque tenía que ir por primera vez a la televisión nacional y no tenía esos zapatos para coordinar con la ropa. Era sábado y domingo debía presentarme en El Gordo de la Semana uno de los más vistos a nivel nacional, y me dije: “bueno Xiomara, aquí tienes que hacer un ejercicio de humildad, tú eres lo que tú eres, no tienes zapatos nuevos para estrenar en televisión pero no voy a dejar de salir en El Gordo de la Semana por unos benditos zapatos”. Entonces fui y se me ocurrió cantar descalza porque los pies siempre combinan con cualquier ropa.
Entonces cuando hice el espectáculo “Xiomara Fortuna descalza” fue una respuesta porque me habían entregado el Premio Casandra a Cantante Femenina del Año y yo lo recibí descalza porque ya lo seguí haciendo siempre, para no olvidarme de quién soy y de dónde vengo y no perderme en el ir y el andar. Lo recibí descalza y fui muy criticada por la prensa, me pegaron bastante duro los periodistas y como respuesta a eso hice “Xiomara Fortuna Descalza” en el Teatro Nacional.
- Vamos a reflexionar sobre algunos de los discos de la larga discografía de Xiomara que tiene muchas producciones de estudio y en vivo. Primero me gustaría que nos digas igual que Victor sobre este tema de tener un sonido
- Yo creo que el sonido de un artista es sumamente importante, eso te coloca como un producto diferente. Escuchamos cantantes populares con el mismo sonido y no sabes diferenciar uno del otro, cuando un sonido se pega a nivel comercial lo siguen utilizando y explotando para calar más rápido en el gusto popular. Cuando me inicié no pensé en sonido como tal, pero sabía que quería tener una identidad, que mi música tenía que ser original. Me he empeñado que cada uno de los discos tengan un sonido que sea Xiomara Fortuna, por eso participo en los arreglos y en todo el proceso.
- Se ha logrado porque tus discos tienen el sonido de Xiomara, el concepto, tu tímbrica tan peculiar. Son muchos pero escoge lo que quieras hablar. De La Loma al Llano, Balbuceos, Kumbajey, Tonada para un Querer, Paseando, Pa Cantarte a Ti, Solo Poemas, discos de conciertos en vivo además de los singles con sus featurings también…
- Empezando por el principio De La Loma al Llano, que se grabó en LP un disco no muy conocido que tuvo un resulado interesante al hablar de fusión y música raíz dominicana. Es un trabajo a partir de poemos escritos por mujeres del campo . Una experiencia extraordinario con el equipo de MUDE (mujeres en desarrollo) con el que nos trasladábamos a donde vivían las mujeres en el campo para que nos compartieran sus escritos. La radio en esa época, y ahora más, estaba cargado de violencia. Lo que detonó en ese momento fue la canción “La Soga” que decía “a los mujeres de ahora hay que tener cuidado, amarrarlas con soga y si se come la soga amárrala con cadena” un merengue que se puso de moda y las mujeres cantaban y sin darse cuenta multiplicaban esas ideas machistas y violentas. Dijimos que ellas escriban sus letras para ponerle música y se expresara su pensamiento. Un documento histórico sobre la situación de las mujeres en los 80, y musicalmente con arreglos de Toné Vicioso, se invitó a Roldán, a Duluc que hizo las percusiones, algo amplio y representativo del momento.
Cuando Balbuceo, cuando vino ese disco ya en los 90 que yo empecé a viajar mucho a Europa y confrontarme con agrupaciones y artistas internacionales y enfrentarme con carteleras importantes de la música internacional. El disco chupa mucho de lo que estaba pasando a nivel internacional, no había todo el dinero para hacerlo y empezamos a hacer un disco secuenciado con una parte en vivo para que no se sintiera tan maquinita. Creo que logramos un buen resultado.
R: Hay muchas canciones conocidas de ese disco….
X: Bueno uno de los temas que no he podido dejar de cantar es Ahora qué, siempre lo piden y es de ese disco lo hice en el 89.
Ya después viene Kumbajey que es un trabajo donde ya yo había madurado un poquito, luego de haber incursionado en un grupo de Toné Vicioso. Él tenía una banda cuando vino de Nueva York y traía como una revolución en la música. Yo soy muy amiga de su prima, Chiqui Vicioso, que le dijo a Tony que tenía la voz para su proyecto. Empezamos ahí a trabajar con la fusión de lo que Toné traía del jazz y un poco más hacia la raíz. Luego ya yo seguí sola y surge Kumbajey y pude poner de manifiesto lo que había aprendido en ese grupo con Tony y también con el grupo Palemba que fue la continuidad del grupo Convite. En ese momento conocí a Totó Bissainthe una cantante haitiana que trabaja las raíces de Haití y vivía en Francia y yo la visitaba cuando viajaba. Me involucré con artistas de países del Caribe, de Guadalupe, de Martinica, de Puerto Rico. Todo eso hizo una revolución que deriva en ese disco que trata de la dominicanidad, mito, leyenda, cultura, canciones y mujeres de la historia, mucho de lo que nosotros somos.
- En la discografía posterior Xiomara invitó también mucho a cantautores nuevos de cada momento y muchos featurings también cuando eso era una novedad, realmente siempre hubo una generación fusión en Xiomara.
No quisiera dejar pasar Solo Poemas en donde musicalizas poetas dominicanos que tú conociste.
- Realmente comencé musicalizando poemas. En mí siempre la música está latiendo pero no siempre tengo una idea clara de querer hacer una letra, en mí viene después de la música. Primero tengo una idea musical y después me llega la letra con esa misma melodía. Hice varias producciones de poemas, una de poetas dominicanas que viven en Estados Unidos “Del Poema a la canción” y se invitaron cantantes dominicanas a compartir ese trabajo. Yasser Tejeda hizo los arreglos. Luego hice Solo Poemas con los poetas con los que compartí, de quienes puedo hablar por haber estado a su lado y quise visibilizar esos grandes poetas. Que a veces conocemos solo el nombre o un poema, pero tenemos por ejemplo una Aída Cartagena Portalatín que es una poeta nacional con una obra maravillosa del principio al final. Si una quiere ver una artista en toda su trayectoria, una tiene que ir a ver la obra de Doña Aída Cartagena o de Ada Balcácer en la pintura y ver la coherencia en su obra plasmada. Siempre van ahí, ahí ahí, desde un principio. Eso me da a mí mucha fuerza para seguir haciendo lo que yo hago y no dudar ni un momento en lo que yo he creído que estoy haciendo. Ese cd tiene esa valía, con arreglos de Kike Saavedra, mi cómplice en este disco sencillo pero valioso.
Parte 3. Generaciones que se fusionan.